El bulto congelado en el banco verde del parque, era la primera señal que le indicaba que ya estaba llegando a casa.
Eran los 60´, los bailes se alargaban y las faldas se acortaban proporcionalmente. Trece pasos después de pasar el bulto, lo escuhó.
El vals infernal inundaba sus oídos y aceleraba estrepitosamente su corazón avejentado.
La casona abandonada, siempre quieta y misteriosa hoy emanaba una pieza de orquesta, que le dolía pero nadie más parecía escucharla. El anciano se acercó al ventanal de vitró.
Monarcas y doncellas bailaban respetuosos un baile que parecía a un Londres de 1930.
La puerta cedió y el hombre arrugado entró al salón, estaba vacío, como si nada hubiera pasado allí.Una lágrima rodó por su mejilla y la puerta se cerró.
La bella música comenzaba mientras una hermoosa doncella le tomaba de la mano, y con voz aterciopelada y mirándolo a los ojos le susurró:
"Te estábamos esperando"
Hecho por Agustina S.
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Hace 15 años
3 comentarios:
es escucharla no escucarla jaajaj
nos e como subir la foto
y es hermos adoncella no lo qe qiera qe haya puesto
mentirosa
:( tecnicamente miidea colaboracion con palabras raras: michelle Gualda
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